Ventajas del estuco veneciano: lo que debes saber sobre esta técnica

Existen muchas opciones cuando se trata de darle una nueva apariencia a las paredes y los techos, desde la pintura de toda la vida, hasta utilizar revestimientos de piedra. Sin embargo, entre todo el repertorio de opciones disponibles el estuco veneciano es una de las técnicas ideales si buscamos un acabado lujoso y brillante. Gracias a la composición del estuco es posible garantizar un resultado semejante al mármol, pero por una fracción de su precio. Pero si dejamos un poco de lado la estética, se trata de un revestimiento que permite reforzar e impermeabilizar las paredes, lo que evitará la humedad y la aparición de moho.

¿Qué es el estuco veneciano?

Es un revestimiento decorativo originario de Venecia y data del siglo XV. En sí, se trata de una pasta de grano fino que combina diferentes compuestos, como mármol pulverizado, cal, cemento, yeso y pigmentos naturales. Esta composición es precisamente la que le brinda la capacidad de ser moldeado en cualquier forma.

Una de sus cualidades más interesantes es que puede ser aplicado tanto en paredes como en techos, sin importar el material de estos, algo que quizá explique, en parte, la popularidad que esta técnica decorativa ha recibido últimamente.

Con un resultado brillante y suave como el mármol, el estuco veneciano lleva la decoración hasta un nuevo nivel al lograr variaciones de intensidad del color, o el uso de diferentes pigmentos para lograr efectos únicos e interesantes. Aunque para ello es necesario contar con un producto de calidad; MyRevest es una empresa que se dedica a la producción de estuco veneciano, y con su producto lograremos hacer realidad nuestros sueños decorativos.

Más allá de la sofisticación, es un revestimiento de lo más versátil

Aunque la técnica no es para nada reciente, la enorme popularidad parece estar relacionada a la posibilidad de lograr una pared y techos con acabados llenos de sofisticación y elegancia pura.

La capacidad de este revestimiento para renovar cualquier ambiente es evidente, logrando llevar a un nuevo nivel cualquier ambiente gracias a un resultado tan similar al del mármol. Tal es así que no notaremos la diferencia a simple vista. Además, no importa la forma de la superficie, o si queremos tallar el estuco a nuestro gusto, ¡todo es posible con este revestimiento!

Ventajas del estuco veneciano

Hemos dejado bastante clara su capacidad para ser aplicado en cualquier superficie, por lo que es momento de señalar cuáles son sus ventajas en comparación con otras opciones de revestimiento. Quizá una de las más importantes es su resistencia y durabilidad, la cuál puede alcanzar los 70 años fácilmente, por lo que, sin duda, se trata de una inversión que realmente vale la pena.

Requiere de un mínimo mantenimiento

Las superficies recubiertas con estuco veneciano sólo requieren de un poco de agua o de una toalla húmeda para limpiar y deshacerse de las posibles manchas, esto sin comprometer la textura y el brillo que caracteriza el material. Son muchos años de belleza sin que tengamos que preocuparnos.

El aspecto que sólo es posible con el estuco puede revalorizar cualquier ambiente, el impacto de sofisticación y lujo es inmediato, y solo puede ser igualado con materiales muy costosos, como el mármol o el cuarzo.

Cómo aplicar estuco veneciano

Es necesario saber que no es una técnica sencilla. A diferencia de la pintura convencional, sí o sí es necesario contratar a profesionales para lograr el hermoso acabado que caracteriza a este revestimiento. El proceso de estucado es el siguiente:

1. En primer lugar, se debe preparar la superficie; debe estar uniforme, libre de orificios o imperfecciones. Para ello se requiere aplicar masilla y lijar cualquier superficie abultada.
2. Es momento de aplicar una primera capa de estuco, para ello se hace uso de una llana de acero para lograr un resultado uniforme, delgado y completamente liso.
3. Debemos esperar que esta primera capa seque adecuadamente.
4. Se extiende una segunda capa de estuco, pero esta vez, la llana se debe mover de forma diagonal. Luego de que se hayan secado las dos primeras capas, se añade un estuco con pigmentos para lograr betas con el efecto deseado.
5. Por último, se aplica una cera con movimientos circulares, intentado lograr una textura uniforme y brillante.