Mezcla la pintura y crea tus propios tonos

Si has cambiado la decoración, seguramente tendrás unos cuantos restos de pintura olvidados en algún rincón de tu casa. Normalmente, suelen ser muy poco como para pintar una habitación completa, o sencillamente te has cansado del tono. Para aprovechar esos restos, no hay nada mejor que mezclar la pintura y crear tus propios tonos.

Mezclar tu propia pintura es tan simple como elegir una base neutra para comenzar e ir agregando los colores y mezclando con una espátula o con la herramienta de mezclado del taladro, pero conseguir el tono perfecto requiere trabajo extra. El conocimiento del espectro de color y cómo se crean los diferentes tonos es útil. Utiliza la rueda de color, aunque sea una versión muy básica para aprender de donde viene cada color.

Para facilitar el trabajo, deja una parte de pintura del color neutro, base para solucionar cualquier problema de color. Asegúrate de mezclar una cantidad suficiente para cubrir todo el espacio y completar el trabajo y que sobre un poco para hacer retoques.

Es importante que verifiques el tipo de pintura antes de comenzar a mezclar. Si la base es de caucho, todos los tonos que utilices deben ser del mismo tipo.

Trabaja en una habitación bien iluminada, añade el color más oscuro al color más claro poco a poco para no alterar el color de la pintura de forma demasiado drástica.

Después de cada adición, mezcla muy bien, hasta que ambos colores se fundan completamente. Pinta una muestra utilizando un pincel de espuma pequeño en una hoja de papel y en la pared de la sala en la que irá la pintura para poner a prueba el tono bajo condiciones de iluminación de la habitación.

Deja que la pintura de las muestras de prueba se seque completamente antes de hacer cualquier cambio a la combinación. Toma tiempo para ver como reacciona el color con diferentes condiciones de luz natural.

Por ejemplo, para crear un tono gris azulado, añade a una base beige algo de azul y un poco de negro. Si ese mismo azul lo mezclas con blanco y un poco de pintura café, podrás crear un tono un poco más cálido. No temas jugar con los colores y las proporciones. Aprovecha cualquier resto de pintura para crear el tono perfecto.