Alfombras para decorar cocinas y baños

Las alfombras son elementos básicos y muy socorridos en la decoración de hogar. Junto con piezas como las cortinas constituyen herramientas indispensables para vestir la casa. Un rincón cambia enormemente si nos dedicamos a buscar una pequeña alfombra que pueda aportar color y calidez, siempre teniendo en cuenta el resto de tonalidades de la habitación para no mezclar demasiado.

Su principal ventaja es que además de ser un elemento decorativo nos ayudará a evitar rozaduras en parqué y suelos delicados. Algo que suele suceder debido a la colocación de grandes y pesados muebles. Además, son ideales para aportar mayor calidez a las estancias frías de nuestra casa, y es que no hay mejor sensación que poner los pies descalzos sobre una suave alfombra.

Si bien es cierto que normalmente este elemento se suele emplear en habitaciones como el comedor, dormitorios o salas de estar, lo cierto es que el efecto que pueden conseguir en lugares como el cuarto de baño o incluso la cocina es asombroso.

No se trata de escoger grandes piezas para cubrir la totalidad del suelo del baño, por ejemplo, como si fuera una moqueta; mas bien debemos pensar en pinceladas de color, pequeños aportes a modo de retales que hagan el aseo o cocina mucho más acogedores.