Lámpara colgante hecha con botellas recicladas

Las lámparas colgantes son capaces de otorgar sentido e identidad a cualquier espacio, sobre todo si son de colores llamativos y formas que se conviertan en el centro de atención del espacio. Si bien es cierto que en el mercado puedes conseguir cientos de modelos adecuados para distintos presupuestos, hacer tu propia lámpara siempre te dejará en posesión de un objeto decorativo original y único que tendrá un significado mucho mayor que uno fabricado en serie. Una de mis piezas favoritas es esta lámpara colgante hecha con botellas recicladas, pues es de materiales sencillos, fácil de hacer y el resultado es sencillamente impresionante.

Para hacer esta lámpara colgante necesitarás varias botellas de plástico, del color que prefieras, hilo de nylon y un soporte circular de alambre para la lámpara. Puedes usar uno viejo o hacer uno con alambre. Comienza abriendo las botellas de plástico, recortando con un exacto la parte superior y la inferior. Esto te dejará con una pieza de plástico rectangular. Colócala bajo algún objeto pesado para aplanarla, pues de este modo será más fácil de manipular.

Una vez tengas las piezas rectangulares, necesitarás cortarlas en pequeños cuadrados o rectángulos (puedes probar con otras formas desde estrellas hasta hexágonos, depende de ti). Te recomiendo medir y trazar las figuras usando un marcador borrable para que todas sean del mismo tamaño. Córtalas usando un exacto o una tijera muy afilada. El número de piezas dependerá del largo de tu lámpara.

Una vez tengas todas las pequeñas piezas cortadas, crea tiras uniéndolas con hilo de nylon. Juega con diferentes largos para crear lámparas con más movimiento y asimetría, lo que le dará un look más moderno. Ata las tiras de cuadraditos al soporte de alambre e instala en tu bombilla. Los efectos creados por la luz pasando a través del plástico traslúcido le dará un look fabuloso a tu espacio.

Imágenes: Recíclame, recíclame